Debes trabajar cada dìa como si tu vida
estuviera en juego.
Siéntete agradecido por las tareas y por lo
que éstas te exigen. Si no fuera por tu trabajo, sin que importe cuán
desagradable te parezca, no podrías comer tanto, ni disfrutar tanto, ni dormir
tan profundo, ni estar
tan sano, ni gozar de las sonrisas de gratitud
de los que te aman por lo que eres, no por lo que haces.
Debes aprender que, con paciencia, puedes
controlar tu destino.
La paciencia es poder. Empléala para
robustecer tu espíritu, para
dulcificar tu carácter, para calmar tu
enojo, para sepultar tu envidia,
abatir tu orgullo, refrenar tu lengua,
contener tu mano y entregar tu ser,
a su debido tiempo, a la vida que mereces.
Debes trazar tu camino con cuidado o
siempre iràs a la deriva.
Traza tus planes hoy mismo. Pregúntate
dónde estarás de aquí a un año,
si todavía vas a estar haciendo lo mismo que
estás haciendo ahora. Luego
decide dónde preferirías estar en términos
de riqueza, posición o
cualquier otra cosa que sea tu sueño.
En seguida,
planea lo que tienes que hacer enlos próximos doce meses
para alcanzar tu
objetivo.
Y, finalmente, ¡hazlo!
Debes prepararte para la oscuridad,
mientras viajas bajo la luz del sol.
Recuerda que nada es permanente, pero,
sobre todo, atesora el amor que
recibes. Este sobrevivirá mucho después que
tu oro y tu buena salud se
hayan desvanecido.
Y considera que puedes perder hasta ese
amor, pasado un tiempo, a
sabiendas que un día os reuniréis para toda la
eternidad en un lugar
donde no hay ciclos, no hay altibajos, no hay dolor ni
pesadumbre y,
sobre todo, no hay fracasos.
Debes sonreìrle a la adversidad hasta que
èsta se rinda a tus pies.
Recuérdate tú mismo, en tus horas más
negras, que todo el fracaso es
sólo un paso más hacia el éxito, que todo
descubrimiento de lo que es
falso te dirige hacia lo que es verdadero, que todo
prueba agota cierta
forma tentadora de error y que toda adversidad
sólo cubrirá durante
algún tiempo tu sendero hacia la paz y la realización.
Debes comprender que los planes son sòlo
sueños cuando no hay acciòn.
Ríete de tus dudas y sigue adelante. Y si
es descanso lo que buscas en
lugar de trabajo, anímate. Cuando más
hagas, más puedes hacer y
mientras más diligente seas, mayor descanso tendrás.
Actúa u otros actuarán antes que tú.
Debes sacudir las telarañas de tu mente antes de que èstas te aprisionen.
Nunca dejes que la preocupación por el
mañana ensombrezca el día de hoy.
¡Qué locura es esperar el mal antes de que
acontezca! No desperdicies el pensamiento de un solo momento en lo que puede
que jamás suceda. Preocúpate sólo por el presente. El que se preocupa por las
calamidades, las sufre doblemente.
Olvídate del pasado y deja que Dios se
preocupe del futuro. Él es mucho más capaz que tú.
Debes aligerar tu carga si quieres llegar a
tu destino
De todos los bienes materiales innecesarios
que abrazas, de todos los
placeres que gozas, no te podrás llevar de
este mundo más de lo que
puedes sacar de un sueño.
Admite la riqueza de
mala gana en tu hogar, pero nunca en tu
corazón. Simplifica tu vida. Es más
aquel que se contenta con menos.
Nunca debes olvidar que siempre es màs
tarde de lo que piensas.
Fija esa advertencia en lo más profundo de tu mente, no para que
te
cause congoja, sino para que recuerdes que el día de hoy puede ser
todo lo que te quede.
Aprende a vivir con la muerte, pero nunca huyas
de ella.
Porque si mueres, tú estarás con Dios; y,
si vives, Él estará contigo.
Nunca debes esforzarte es ser otra cosa que
tù mismo.
Has sido bendecido con capacidades
especiales que son sólo tuyas.
Úsalas, sean cuales fueren, y no trates de ponerte el sombrero
de
ningún otro. Nadie puede ocupar tu lugar.
Compréndelo y
sé tú mismo.
No tienes obligación de triunfar.
Tu única
obligación es la de que seas tú mismo.
Realiza el mayor esfuerzo en las cosas que
mejor haces y sabrás,
en tu alma, que tienes el éxito más grande del
mundo.
Og Mandino
Ediciòn *Sendero de Luz* El Portal del Ama
Ediciòn *Sendero de Luz* El Portal del Ama