Al levantarte por la mañana,
y con el corazón muy contento, dì:
"Buenos días
vida, buenos días amor, buenos días Madre Tierra".
Es lo único que ella quiere. Recuerda:
"Buenos días
vida, buenos días amor, buenos días Madre Tierra".
Y de esta forma sabrás que ella ya está a tu lado, con los brazos abiertos,
Y de esta forma sabrás que ella ya está a tu lado, con los brazos abiertos,
y que está contigo, abrazándote.
Cuando termines de hacer lo que te he dicho, cuando ella te toque de esta
manera, haz tres respiraciones:
una por el amor, otra por la vida, y otra
por la Madre Tierra.
Y si quieres hacer todavía más, puedes dedicarle una oración.
Y si quieres hacer todavía más, puedes dedicarle una oración.
Recuerda que ella es el amor de Dios, ella es la creación del amor
y ella
sostiene el regalo del amor.
Y nosotros somos una combinación
de Dios y la Madre Tierra,
y el milagro que somos es amor de Dios y amor
de la Madre Tierra.
Erena Rhöer -Mujer Medicina Maorí