Como todo el día estamos pensando y
decretando, todo el día estamos orando, en forma negativa o en forma positiva,
y creando nuestras propias condiciones, estados y sucesos.
Lo importante es mantenerse en el ànimo que
expresa la oraciòn. Si despuès de afirmar te dajas regresar al polo negativo,
destruyes el efecto de la oraciòn. Cuida tus pensamientos. Cuida tus palabras. No
te dejes arrastrar por lo que expresen otros. Recuerda que ellos ignoran lo que
tù ya vas conociendo.
Lo que pienses y pidas para ti, piénsalo
también para los demás. Todos somos uno en espíritu y esa es la forma más
efectiva de dar. Mejor que pan y limosna ya que el pan y la limosna duran sólo
unos instantes, mientras que la Verdad se queda con el otro para siempre. Tarde
o temprano tu don espiritual le entrará en la mente consciente y habrás hecho
labor de salvación en un hermano. El Principio del Ritmo, que es la ley del
péndulo, el búmerang, te devuelve el bien que haces (como también el mal que
haces).
Se ha dicho que “uno con Dios es la
mayoría”, de manera que una sola persona que eleve se conciencia al plano
espiritual y reconozca la Verdad en la forma expresada más arriba, es capaz de
salvar de la ruina a una organización, salvar de la crisis a una comunidad, una
ciudad o una nación, porque actúa en el plano espiritual que es la Verdad y
ésta domina a todos los planos inferiores. “Conoced la verdad y ella os hará
libres”.
Conny Mendez