He observado que al Universo le gusta mucho
la gratitud. Cuanto más agradecidos somos, más bienes obtenemos. Al decir
«bienes» no me refiero sólo a cosas materiales, sino a todas las personas,
lugares y experiencias que hacen la vida tan maravillosamente digna de ser
vivida. Ya sabes lo bien que uno se siente cuando su vida está llena de amor,
alegría, salud y creatividad, y cuando encuentra los semáforos en verde y sitio
para aparcar. Así es como está destinada a ser nuestra vida. El Universo da con
abundancia y generosidad, y le gusta que se le dé las gracias.
... La gratitud produce más cosas por las
que estar agradecido; aumenta la abundancia. La falta de gratitud y las quejas
producen poco de qué regocijarse.
... El Universo siempre nos da lo que
creemos merecer.
... Desde hace tiempo acepto todos los
cumplidos diciendo: «Lo acepto con alegría, placer y gratitud». Me he dado
cuenta de que al Universo le gusta mucho esa expresión, y constantemente recibo
los regalos más maravillosos.
... Nos conviene agradecer incluso las
lecciones que recibimos. No hay que huir de las lecciones; son pequeños tesoros
que se nos dan. Cuando aprendemos de ellas, nuestra vida cambia para mejorar.
Ahora me alegro cuando veo otra parte más de mi lado oscuro. Sé que eso
significa que estoy preparada para abandonar algo que ha estado dificul-tando
mi vida. Digo: «Gracias por enseñarme esto, para poder sanarlo y continuar
adelante».
... Dediquemos todos los momentos posibles
de cada día a agradecer todo lo bueno que hay en nuestra vida. Si es poco lo
que tienes ahora, aumentará. Si tu vida ya es abundante, esa abundancia también
aumentará- De este modo siempre se gana. Tú te sientes feliz y el Universo se
siente feliz. La gratitud aumenta nuestra abundancia.
Comienza un diario de agradecimientos. Cada
día escribe algo por lo cual estés agradecido. Diariamente di a alguien lo
agradecido que te sientes por algo. Da las gracias a los dependientes de las
tiendas, a los camareros, al cartero, a tu jefe o tus empleados, a tus amigos,
a tus familiares y a perfectos desconocidos. Cuenta el secreto de la gratitud,
propágalo. Contribuyamos a hacer de este mundo un lugar de agradecimiento, por
todo lo que damos a los demás y por todo lo que recibimos de ellos.
Extractos del Libro “Gratitud” Louise Hay