Cada mañana en la meditación y durante el
día, en cualquier lugar que te encuentres, puedes llevar tu atención hacia tu
Santo Cristo Propio. Esta práctica te llenará de mucha paz y gozo espiritual.
La puedes hacer de la forma siguiente:
1.
Relaja todo tu cuerpo, bien sea que estés acostado o sentado.
2.
Visualiza o imagina dentro de tu corazón tu Loto de Doce Pétalos con una
luminosidad de mil soles y trata de ver en su interior una Joya con un
esplendor que sobrepasa toda imaginación, y desprendiéndose de ella, una Llama
de tres colores: Azul, Dorada y Rosa, contentiva de los tres aspectos de Dios:
Voluntad, Sabiduría y Amor.
3.
Como tu Santo Cristo Propio tiene su nombre, tú le puedes llamar por él y
decirle: “YO SOY” y como dentro del Loto está la Joya de Luz que es El mismo,
puedes decirle:
“YO SOY la Joya en el Loto”
“YO SOY lo que YO SOY”