por Jennifer Hoffman
25 de Julio de 2012
Querida Jennifer:
Me siento tan inútil y que no estoy haciendo lo que se supone que debo
hacer. Tengo cuatro hijos, cuido de ellos todo el día, alcanzo a ver
unos cuantos clientes, y no tengo energía para hacer nada más. Siento
que estoy perdiendo mi tiempo, que hay algo más que debería estar
haciendo y sin embargo no tengo el tiempo ni la energía para hacer nada
más. Siento que no estoy viviendo mi propósito, pero no puedo ver cómo
puedo hacer más de lo que hago ahora.
Respuesta de Jennifer: Tú
estás haciendo exactamente lo que necesitas estar haciendo en este
momento. Cuando sea hora de que hagas otra cosa, esa puerta se abrirá
para ti. Con respecto a tu propósito en la vida, estás viviéndolo ahora
mismo. Nuestro principal propósito en la vida, aquel con el que todos
nacemos, es sanar karma, heridas álmicas y traumas de vidas pasadas. Tú
estás encontrando esa sanación en tus hijos porque, aunque te sientes
‘inútil’, como tú dices, sí disfrutas de ser madre y encuentras una
gran alegría en tus hijos. Pero cuando sientes el dolor y el
sufrimiento en el mundo, debido a que eres empática, piensas que
deberías estar haciendo algo para ayudar con eso. Y lo estás haciendo,
pero no en la forma que crees.
En tu caso, hay una
fuerte necesidad de sanar traumas de vidas pasadas con respecto a haber
visto morir a tus hijos, que te fueran arrebatados, perderlos debido a
enfermedades u otros sucesos dolorosos. Para esta vida, te prometiste a
ti misma que tendrías hijos y cuidarías de ellos. De lo que no te
diste cuenta con esa promesa, es que todo lo demás en tu vida quedaría
en suspenso hasta que cuidaras de tus hijos. Así que mientras estás
cuidando de ellos y siendo su madre, estás sanando tus heridas álmicas y
mucho trauma de vidas pasadas, por ti y por ellos. Disfruta de este
tiempo, disfruta de cada momento con tus hijos, ya que eso está
cumpliendo tu propósito de vida.
Desde la perspectiva de
tus hijos, ellos necesitan tener una vida contigo en la que puedan
realmente disfrutar de ser atendidos por ti, pasar toda su niñez contigo
y tener la experiencia completa e ininterrumpida de ser niños. Es por
eso que tienes un par de niños que son muy dependientes y necesitan
mucha atención, o a veces tus hijos van a ponerse muy pegajosos y
querrán tenerte cerca. Ellos están recordando traumas de vidas pasadas
donde fueron arrebatados de ti (o tú de ellos) y necesitan un poco de
atención adicional.
No cometas el error de pensar que tu
propósito de vida es algo distinto de lo que estás haciendo, porque a
cada momento siempre estamos en nuestro propósito de vida. Cuando hayas
completado esa promesa que te hiciste a ti misma y a tus hijos, podrás
pasar a otro propósito de vida y encontrarás que esas puertas se abren
fácilmente para ti. Es entonces que sabrás que es el momento apropiado
para que pases a otra cosa. Por ahora, disfruta de cada momento con tus
hijos, ya que has anhelado y llorado tu maternidad perdida muchas
veces en otras vidas. Permanece en toda la energía de tu vida y no
estarás tan cansada. Estás tratando de vivir una doble vida y tu
energía se divide entre las dos. Ser madre es tu propósito por ahora,
así que sé la mejor madre que puedas, disfruta de tus hijos y de donde
estás. Cuando sea la hora para un cambio, lo sabrás.
Copyright (C) 2004-2012 por Jennifer Hoffman y Enlightening
Life OmniMedia, Inc. Todos los derechos
reservados. Este material está protegido por leyes
de derechos de autor de los EE.UU. e
internacionales y puede ser distribuido libremente en su
totalidad, siempre y cuando se incluya el nombre del
autor y el sitio web www.enlighteninglife.com.
Traducción: Margarita López
Edición: El Manantial del Caduceo