La Energìa Viva de Dios fluye a travès de mi
cuerpo,
con Su Aliento de Vida renueva y fortalece
todo mi Ser.
La Luz Sanadora que brilla incandescente
desde mi
Centro Sagrado disuelve toda oscuridad y todo
vuelve
a la Perfecciòn Primigenia. Gracias Padre
porque asì es.
LUZ Y BENDICIONES!!!