La Presencia de Dios me envuelve y con Su Amor
sana todas mis heridas, me libera de ansias y
preocupaciones, regenera y fortalece cada
cèlula
de mi cuerpo, purifica mis emociones y
pensamientos.
Permanezco en un estado de Paz y Armonìa
desde ahora
y para siempre. Gracias Padre porque està
hecho.
LUZ Y BENDICIONES!!!